Los consejos que dio el psicólogo de gatos Jackson Galaxy

Los consejos que dio el psicólogo de gatos Jackson Galaxy

clarin.com

De gira por Sudamérica, Jackson Galaxy aplica lo mismo que exige a quienes lo siguen: educar a la gente para que la vida de los gatos sea mejor y, así, también la de sus dueños. El auditorio de la UCA recibió a 700 fanáticos de gatos que ganaron sus entradas para deleitarse de la experiencia del conductor del programa “Mi gato endemoniado” de Animal Planet, un verdadero "psicólogo" felino.

“Aunque todos los que estamos acá adoptáramos a 10 gatos, no alcanzaríamos a sacarlos de la calle”, dijo Jackson después de preguntar al público cuántos gatos tenían. A los que respondieron “uno”, les pidió que adoptaran a otro; a los que dijeron “cinco” los felicitó y, como si fuera una subasta, el ganador de sus aplausos fue una mujer que convive con 24 gatos. El remate del protagonista fue pedirles a todos que ayuden a concientizar al mundo en el cuidado de estos animales.

Jackson tiene un refugio que alberga a gatos de la calle mientras se dedica a resolver los casos más conflictivos y televisarlos para que todo el que quiera aprenda de su método conductista. Su éxito es internacional y va por la sexta temporada. También publica libros y se enorgullece de poder decir: “La gente me vio fallar”. Se refiere al caso particular de Lux, el gato que tuvo atrapada a una familia entera en el baño de la casa y que necesitó de la policía para salir y de Jackson para domesticarlo. Para él, fue el gato menos predecible y más peligroso que conoció. Cuando pensaba que el caso estaba resuelto, lo volvían a llamar. “Es que al final son animales, no los podemos controlar”, expresó.

“Por favor no mates a mi familia” es la frase que, según Jackson, la gente piensa cuando lo ve llegar a su casa para resolver problemas con gatos. Tiene ambos brazos tatuados y, en cada mano, lleva al menos tres anillos, además de los rasguños que se alternan de lugar. Su estilo se condice mejor con el músico que una vez fue, pero hace 20 años que aceptó un trabajo en un refugio y, con él, su vocación felina. “Catboy” fue su primer apodo, porque los gatos lo eligieron a él. “Cuando almorzábamos en el trabajo se acercaban sólo a mí”, cuenta. Su desafío personal fue pensar cómo podía hacer más adoptables a esos gatos. Y allí nació todo lo que hoy él es.

“Derribador de mitos” podría ser otro de sus apodos. Jackson reveló en el encuentro que los gatos son muy sociables y que el problema es esperar que actúen como perros. “El gato es un animal misterioso y eso es lo que atrae o aleja a la gente”, explicó. También desmintió el mito de que los gatos ahogan a los bebés, pero advirtió que “es necesario supervisar siempre a los gatos cuando están cerca" porque ellos buscan calor y se les acercan justamente porque los bebés son motores de calor. Por último, admitió la enfermedad que contagian los gatos a las embarazadas (toxoplasmosis), pero dijo que se evita todo riesgo si la persona que limpia las necesidades del gato no es la embarazada. Jackson hizo énfasis en los mitos porque conoce casos de abandono de gatos que nacen de la ignorancia en determinados temas.

Después, habilitaron el turno para que el público hiciera preguntas. "¿Cómo hacer para lidiar con gatos conflictivos en espacios reducidos?", le consultaron. El experto respondió que en su próximo libro (Catify to satisfy) dará muchos ejemplos. Pero que lo importante es sacarlos a pasear, ejercitar y, si se puede, que los voluntarios se los lleven a la casa por unos días porque las jaulas los vuelven aún más agresivos. "¿Pueden convivir perros y gatos?", fue otra consulta. "Sí, pero hay que domesticar al perro para que lo respete al gato, evitar que se le tire encima porque sino el gato lo va a rechazar. Un consejo es hacer que compartan los mejores momentos, por ejempo, cuando les das de comer", respondió Galaxy.

Los asistentes aplaudieron mucho y se fueron rápido, aunque algunos se hicieron unos minutos para hablar con Clarín. Como Jésica y Guadalupe: son hermanas y tienen un gato hace nueve meses, que es muy enérgico. Se levanta a las cinco de la mañana y despierta a uno por uno de la familia. Desde que lo tienen empezaron a ver el programa y aplican los consejos de Jackson porque les resultan útiles. Por su parte, Eleonora fue con su hijo, ambos "gateros". Tienen cinco felinos, cuatro son de la calle. Momoya, uno de ellos, habla por teléfono: "Cada vez que le acercamos uno se pone a maullar", asegura la dueña. Sobre Galaxy, destacó "esa radiación natural que tiene, lo sigo desde que está en la tele". También estuvo Marta, de 75 años, que llegó con su sobrina porque le encantan los gatos, aunque ya no pueda tener uno. Se fue con un regalo muy codiciado: un autógrafo del orador.

Como cierre, Jackson hizo varias reverencias para agradecer al público que concursó por sus entradas enviando fotos y anécdotas felinas a diversos medios. Su próximo destino es México.